Quizá te haya llegado un caso a tu clínica de logopedia o eres una especialista de audición y lenguaje que este curso trabaja con alumnado TEA.
Sea cuál sea tu situación, has llegado al lugar correcto porque te voy a contar las 3 claves para tener éxito cuando trabajes con personas que tienen diagnóstico TEA.
Clave 1 para trabajar con un niño autista: empieza por crear vínculo
No vas a conseguir que se siente en la mesa a trabajar si no confía en tí; de hecho lo más probable es que tire la silla, lance los bloques o se suba a la mesa.
¿Por qué? porque no os conocéis, es la primera vez juntos y le llevas directamente a una mesa con actividades curriculares.
Ya te digo yo que por ahí no es 😣
Situación: nos estamos conociendo.
Solución: hagámonos amig@s, haré que quieras quedarte conmigo 😀
- para conocerle: observa cómo se entretiene en tu espacio, a dónde se acerca y de dónde se aleja, qué le disgusta y por qué se enfada contigo.
- para crear vínculo: no es dar mimos ni evitar problemas para que no se enfade, es por ejemplo, ofrecerle aquello que le guste y respetar sus tiempos sin invadir ni atosigar.
Clave 2 para trabajar con un niño autista: pon límites y normas desde el principio
Probablemente creas que no entiende las cosas, que su comprensión es escasa y que por eso no sigue órdenes.
Más bien lo que ocurre es que no estás usando las estrategias que sí funcionan para poner límites y normas:
- estrategia primero/después: se que te apetece jugar con las canicas, mira ¡primero hacemos el puzzle y después las canicas.
- estrategia clarificar el acabado: todo debe tener un principio y un final así que signa y di “se acabó” cada vez que terminéis una actividad. ¡Ah, no olvides la caja de acabado!, donde guardamos las cosas que hemos utilizado al terminarlas.
- estrategia las cosas se dicen bien: es muy probable que tenga dificultades en la comunicación y que utilice conductas inapropiadas para hacerse entender (gritar, patadas, lanzar…) así que tu primer estrategia será introducir un SAAC (sistema alternativo o aumentativo de comunicación) tanto si habla como si no porque en esas situaciones le va a costar recordar “cómo se dice bien” y necesita algo que se lo recuerde. Puedes usar llaveros, cuadernos o comunicadores dinámicos; yo soy muy partidaria del uso de signos para esas situaciones y defensora del programa Comunicación total – Benson Schaeffer como herramienta a combinar con el Lenguaje natural asistido.
Clave 3 para trabajar con un niño autista: plantea objetivos de intervención que sean útiles y pueda conseguir para evitar la frustración de no ver avances.
A la hora de hacer tu programación o plan de trabajo incluye objetivos que se basen en enseñar habilidades de comunicación, comprensión y regulación para que pueda desenvolverse en su día a día con la mayor autonomía e independencia posibles.
Te habrán enseñado a trabajar objetivos como mejorar el contacto ocular o fomentar la intención comunicativa pero pregúntate siempre: ¿para qué le va a servir?
¡Vamos a darle la vuelta!
Objetivo: mejorar el contacto ocular
VS
Objetivo: mirar a los ojos de la persona que le está haciendo cosquillas para demostrar su disfrute y pedir más atención de manera apropiada.
Este objetivo es más útil, lo puede conseguir y, además, le sirve para solucionar algunas dificultades del día a día como arañar para que mamá le preste atención.
—
¿Necesitas llenar tu maleta con estrategias y soluciones para conseguir trabajar con tus niños con autismo?
Pongo a tu disposición todas mis estrategias y recursos que me funcionan en mi trabajo diario, los cuales he aprendido en estos 20 años de profesión con sus aciertos y errores.